«Ejemplo de arbitrariedad y de la falsedad en sus argumentos». Así calificó este jueves el portavoz de la Junta y vicepresidente, Francisco ...
«Ejemplo de arbitrariedad y de la falsedad en sus argumentos». Así calificó este jueves el portavoz de la Junta y vicepresidente, Francisco Igea, el anuncio de la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, de que Valencia y la Región de Murcia recibirán en octubre un adelanto de las entregas a cuenta al considerar con son comunidades especialmente perjudicadas por el actual sistema de financiación. Para Francisco Igea, si esta medida se puede adoptar con estas autonomías, se puede hacer con el resto. Además, recordó que no existe ninguna legislación que permita una cosa o la otra, por lo que no tiene sentido el argumento de que no se pueden transferir a Castilla y León los 440 millones pendientes de la actualización de las entregas a cuenta y del IVA. Como tampoco lo tiene, señaló, que no se adopten medidas para garantizar la financiación de las comunidades, cuando llevan meses adoptando otras muchas de «carácter electoral». El también consejero de Transparencia afeó por «indignante» que la ministra de Hacienda no haya respondido aún a la carta que la envió el consejero de Economía y Hacienda, Carlos Fernández Carriedo, reclamándole las partidas adeudadas y la convocatoria urgente del Consejo de Política Fiscal y Financiera. «No es que no nos devuelva el dinero, es que no responde a las cartas», se lamentó. También denunció que el Gobierno y el PSOE estén «más centrados en construir su relato que en responder a las necesidades de los ciudadanos, pensando sólo en la política y en el interés de su candidato». Precisamente, una de las consecuencias del bloqueo que mantiene al Gobierno de España en funciones es la dificultad para elaborar los presupuestos de la Comunidad, una labor que, no obstante, según señaló Francisco Igea, ya ha comenzado, de forma que se está trabajando «con todos los escenarios posibles», habida cuenta de las dificultades para diseñar unas previsiones de gasto sin conocer las entregas a cuenta ni las transferencias que llegarán de la Administración central por otros conceptos. Donde ayer sí se dieron a conocer nuevos datos fue en lo referente al impuesto de sucesiones y donaciones, cuya práctica eliminación tendrá un coste para las arcas regionales de 38 millones de euros. El vicepresidente de la Junta, que concretó este dato, acusó al PSOE de «mala fe» o «desconocimientos» al asegurar que la Administración autonómica dejaría de ingresar 180 millones de euros. Sucesiones y donaciones FranciscoIgea explicó, no obstante, que la eliminación de citado tributo, que afecta, sobre todo, a las donaciones, permitirá que los empresarios agrícolas puedan dejar sus explotaciones a sus hijos antes de que fallezcan y eso supone, en definitiva, que se renueva y rejuvenece el tejido empresarial. Esta consecuencia, aunque aún no se puede medir, supone un impulso a la competitividad, apuntó.by via España
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